Imprimir esta página

Introducción


La atmósfera es una finísima película de apenas 30 km. de espesor que rodea la Tierra, y que su especial composición ha permitido que se den las condiciones idóneas para albergar vida en ella.

El Cambio Climático Global, consiste en una modificación atribuible directa o indirectamente a las actividades humanas que alteran la composición química atmosférica, hemos cambiado y continuamos cambiando el balance de gases que forman la atmósfera. Esto es especialmente notorio en gases invernadero claves como el CO2, Metano (CH4) y óxido nitroso (N2O). Estos gases naturales son menos de un 1% del total, pero son vitales pues actúan como una "manta" alrededor de la Tierra. Sin esta capa la temperatura mundial sería 30°C más baja.

El problema es que estamos haciendo que esta "manta" sea más gruesa. Esto a través de la quema de carbón, petróleo y gas natural que liberan grandes cantidades de CO2 a la atmósfera. Cuando talamos bosques y quemamos madera, reducimos la absorción de CO2 realizado por los árboles y conjuntamente liberamos el dióxido de carbono contenido en la madera. El criar bovinos y plantar arroz genera metano, óxidos nitrosos y otros gases invernadero.

Según el IPCC (Panel Internacional de la ONU sobre Cambio Climático), una agrupación de 2.500 científicos de primera línea, la temperatura de la superficie terrestre ha aumentado aproximadamente 1°C en el último siglo, y al ritmo actual de emisiones, la temperatura global subirá entre 3 y 6°C en los próximos 100 años. Aunque no parezca mucho, es equivalente a volver a la última glaciación pero en la dirección inversa, además este cambio climático sería el más rápido en los últimos 100.000 años, haciendo muy difícil que los ecosistemas del mundo se adapten.

De los pocos acuerdos establecidos en la Cumbres Mundiales del Clima de Copenhague'09 y Cancún'10, se recalcó la necesidad de no sobrepasar el umbral de los +2° C., cifra a partir de la cual el problema del calentamiento global se nos iría definitivamente de las manos. Esto según el IPCC significa estabilizar la concentración de CO2 en la atmósfera en 350 partes por millón, actualmente estamos en 397 ppm. Lamentablemente los acuerdos solamente están siendo declaraciones de intenciones, no de compromisos efectivos y ni vinculantes.

Poder predecir cómo esto afectará al clima global, es una tarea muy difícil. El aumento de temperatura tendrá efectos expansivos. Efectos inciertos se agregan a otros inciertos. Por ejemplo, los patrones de lluvia, viento y el flujo de las corrientes marinas, que han prevalecido por cientos y miles de años y de las que dependen millones de personas, podrían cambiar. El nivel del mar podría subir y amenazar islas y áreas costeras bajas. En un mundo crecientemente sobrepoblado y bajo estrés, con suficientes problemas de antemano, estas presiones causarán directamente mayor hambruna y otras catástrofes.

La Organización Mundial de la Salud (WHO) lo plantea así: "El cambio climático con certeza conllevará una significativa pérdida de vidas humanas junto con la extinción de incontables especies de plantas y animales".

Atmospheric CO2 data and trend